martes, 30 de septiembre de 2014

El Cielo en Octubre 2014

EL CIELO DE OTOÑO

El cielo de otoño nos permite, sin lugar a dudas, disfrutar de las típicas constelaciones veraniegas en cómodas condiciones de observación y por supuesto, disfrutar, como antesala del espectacular cielo invernal, de constelaciones cargadas de objetos interesantes.

Podemos observar constelaciones como el Cisne, la Lyra o el Águila a la vez que nos adentramos en las maravillas de Andrómeda, Pegaso, Acuario o Perseo.

Las condiciones meteorológicas, sin ser las del verano, tampoco resultan en exceso incómodas y, tras períodos de lluvia se nos puede ofrecer un cielo limpio y claro. Si a eso le añadimos que anochece antes y, por tanto, podemos disfrutar del cielo en horarios más asequibles, nos encontramos en una época del año en la que el cielo no puede esperar a ser observado. ¡Disfrutemos de él!

EL CIELO EN OCTUBRE


Los mapas expuestos están realizados con el programa gratuito Stellarium y se conforman hacia mediados del mes a las nueve de la noche hora peninsular española. Es decir a las 19h Tiempo Universal. Hay que tener en cuenta que en la madrugada del 26 de octubre (noche de sábado al domingo) cambiará la hora y entonces tendremos 20h Tiempo Universal

Siguiendo como otros meses los mapas ofrecidos cortesía de la revista Sky&Telescope, aquí tendremos que imprimir la página número 8

Fases Lunares

Como novedad, incorporamos un calendario mensual con las fases lunares diarias con objeto de preparar mejor nuestros días de observación. Ya sabemos que una noche con un débil creciente lunar, o en la que no haya aparecido todavía el disco lunar, será propicia para la observación de objetos de brillo débil como los llamados objetos de cielo profundo. Por contra, las noches donde aparezca la Luna, en especial los días en los que esté en fase de "cuartos", serán los idóneos para la observación de nuestro satélite.



Las efemérides lunares durante el mes de octubre son las siguientes:

Día  1,  19h32: Cuarto Creciente en Sagitario.
Día  8,  10h51: Luna Llena en Piscis.
Día 15, 20h12: Cuarto Menguante en Geminis.
Día 23, 21h57: Luna Nueva en Virgo.
Día 31, 02h48: Cuarto Creciente en Capricornio.

El día 8 de octubre tendrá lugar un eclipse total de Luna pero no resultará visible desde España. Una vez comentadas las efemérides de nuestro satélite, pasamos a la descripción del cielo de octubre dividido por puntos cardinales.

Norte


Comenzamos con la posición de las "guardas" de la Osa Menor. Las dos estrellas más brillantes del carro de la Osa Menor apuntan al noroeste y, a medida que avance la noche, van perdiendo altura. Justo debajo de ellas, aparece el carro de la Osa Mayor rozando el horizonte con el mango en alto y hacia el noroeste.

La parte más alta sobre el horizonte del norte la ocupa la constelación de Cefeo con su típica forma de casa, en estos meses, invertida. Es difícil distinguir la constelación desde las ciudades pero desde núcleos suburbanos se observa en su totalidad. Y junto a Cefeo, y en dirección noreste, aparece la bellísima constelación de Casiopea con su forma de "3". Casiopea pasa por un "3", una "M", una "W" y una "E" a lo largo de las estaciones. En esta época la vemos en su única "forma numérica". La constelación de Casiopea si suele observarse desde lugares urbanos. Al sur de Casiopea aparece la débil constelación de la Jirafa (Camelopardalis) para cuya observación debemos irnos al campo o a zonas con cielos alejados de la contaminación lumínica. A medida que avance la noche veremos en el horizonte noreste como aparece una brillante estrella, Capella, de la constelación de Auriga, luce así anunciando el invierno que está por llegar.

Este


Si partimos de la constelación de Casiopea y vamos viajando hacia el Este, nos encontramos como, poco a poco, va ganando altura la constelación de Perseo con su variable eclipsante Algol. Más hacia el Este destaca, bien alto, el gran cuadrado que caracteriza la constelación de Pegaso de uno de cuyos vértices se desprende la constelación de Andrómeda con su brillante Nebulosa de Andrómeda

Si nos acercamos al horizonte, aparecerá la constelación de Piscis. En esta constelación las estrellas suelen ser, en general, muy débiles; no suelen ser fácilmente visible desde el interior de las ciudades. La constelación se forma desde un asterismo de forma pentagonal situado en la parte inferior del cuadrado de Pegaso. Desde esa pentágono se desprende una hilera de estrellas que llega prácticamente hasta el horizonte para luego ascender y culminar en un alargado triángulo que cae debajo de la constelación de Andrómeda. Si podemos, no perdamos la oportunidad de reconocer esta curiosa constelación que también guarda algunas joyas entre sus estrellas.

Por la zona donde acaba Piscis, y al Sur de Andrómeda podremos reconocer dos pequeñas constelaciones. La primera, conforme bajamos de Andrómeda, es la constelación del Triángulo, fácilmente reconocible por su parecido con dicha figura geométrica. Y si continuamos descendiendo hacia el horizonte nos encontraremos con tres estrellas relativamente brillantes que conforman el cuerpo central de la constelación de Aries (el Carnero). 

Nuestra visita hacia los cielos del este podemos acabarla por la zona sureste, donde aparece la irregular figura de la constelación de Acuario

Sur


Sobre la parte más alta del horizonte Sur emerge la figura de la constelación del Águila con su brillante estrella AltairLa mayoría de las estrellas de la constelación pueden verse desde núcleos urbanos aunque desde los más contaminados apenas podremos distinguir a Altair y las dos estrellas que la flanquean.Si nos encontramos en el campo, podremos ver como desde la constelación del Águila parte un brazo de la Vía Láctea que parece partirse en dos acabando en el horizonte. El espectáculo que nos ofrece nuestra propia Galaxia es maravilloso. 

Si seguimos en un lugar de observación oscuro podremos observar a la pequeña constelación del Caballito (Equuleus). Son cuatro estrellas en forma de trapecio que se encuentran varios grados al este de Altair. Más al Sureste volvemos a la constelación de Acuario cuyas estrellas son de mediano brillo y a veces se pierden en el brillo del cielo de las ciudades al igual que la vecina Capricornio. Ésta última situada más hacia el horizonte Sur. Tanto Acuario como Capricornio contienen objetos de interés y cargados de belleza. Capricornio toma el aspecto de un gran triángulo con un vértice orientado al Sur. La estrella de primera magnitud que luce al sureste de Capricornio es Fomalhaut, la estrella principal de la constelación (también débil) del Pez Austral. Personalmente siempre me ha llamado mucho la atención esta cercana estrella brillando en los cielos urbanos.

Por último, y acercándonos al oeste ya nos encontramos como van "despidiéndose" las típicas constelaciones veraniegas. El Escudo y Ofíuco van perdiendo altura paulatinamente y Sagitario ya esconde sus estrellas tras el horizonte.  En éste mes el punto rojo que aparece sobre el horizonte suroeste es el planeta Marte. Está situado a baja altura  lo cual merma bastante su observación telescópica.

Oeste

La que más caracteriza al horizonte Oeste en esta época del año esa la gran figura que forma la constelación de Ofíuco y marchando hacia el oeste, la constelación de Hércules con su característico trapecio central que conforma el cuerpo del gigante. Las estrellas de la constelación de Hércules suelen ser medianamente brillantes por lo que pueden ser bien reconocidas en núcleos suburbanos al menos. Al Sur de esta constelación aparece la preciosa Corona Boreal ya, poco a poco, acariciando el horizonte donde ya, casi, se ha puesto la brillante y anaranjada Arturo

Cenit

Quizá una zona muy llamativa del cielo y que sea muy propia para observar durante el otoño sea el cenit y las constelaciones que irán perdiendo altura desde él. La brillante constelación del Cisne puede observarse desde las ciudades con una típica formación en cruz. y cuya estrella principal Deneb brilla en el palo mayor de la misma. Hay mucho que ver en esta constelación y en otoño su observación será mucho más cómoda. 

Observemos también como más hacia el oeste y, aún a buena altura, brilla la figura de la constelación de la Lyra con su brillante estrella Vega reinando sobre el paralelogramo que conforman sus otras cuatro estrellas. Siempre aconsejo visitar la zona de la Lyra con prismáticos a pesar de ser una constelación pequeña. Vega y Deneb conforman, junto con Altair (la más brillante de las estrellas del Águila) el Triángulo de Verano, una estación que despedimos hace poco pero de la que aún disfrutaremos de sus cielos.


Visiblidad de los Planetas en Octubre

Mercurio: visible a finales del mes al amanecer en el horizonte este-sureste.
Venus: visible solo los primeros días del mes muy cercano al horizonte y momentos antes de la salida del Sol.
Marte: visible hacia el suroeste entre Ofíuco y Sagiario brillando con magnitud 1.0
Júpiter: situado en la constelación de Cáncer brilla en la madrugada con magnitud -2.0
Saturno: visible al atardecer en Libra, muy bajo sobre el horizonte.


Lluvia de meteoros Oriónidas

Es una lluvia de meteoros importantes producidas por los restos del cometa Halley que puede observarse durante todo el mes pero que tiene situado su mayor actividad entre los días 19 y 21. Se le conoce así porque los meteoros parecen converger. por un efecto de perspectiva, hacia una zona del cielo situada en la constelación de Orión. Como quiera que dicho radiante alcanza su máxima altura una hora antes de amanecer, puede decirse que será el mejor momento para observar estas lluvias de meteoros.


30 de octubre: Ocultación de Beta Capricorni


En la noche del jueves 30 de octubre tendrá lugar la ocultación de la estrella Beta Capricorni (Beta Cap) por la Luna a las 22h00 TU (23 horas locales)Para entonces la estrella se situará a tan solo 15 grados de altura sobre el horizonte por lo que necesitaremos un horizonte despejado para su observación. La Luna, por su parte, estará iluminada un 47% en fase creciente. Aunque la estrella es brillante (magnitud 3,0) es muy recomendable usar unos prismáticos o un pequeño telescopio para su observación, usando dichos medios la observación podrá realizarse desde la ciudad

jueves, 4 de septiembre de 2014

La Luna y la luz de Aristarco

Ya en la entrada que le dedicamos a la Luna Llena el mes pasado hicimos mención a la diferencia entre las diferentes tonalidades de grises visibles a simple vista en la Luna. Vimos los mares y las tierras e incluso hicimos especial mención de los cráteres radiales Tycho y Copérnico. En ésta ocasión podríamos aprovechar las claras noches de Luna Llena, o los días anterior y posterior, para observarla y aprender un poco de Selenografía. Recordemos que disponemos de un mapa en pdf que podemos imprimir como ayuda al reconocimiento de accidentes lunares. La brevísima descripción que se va a realizar se hace en base a observaciones realizados por unos sencillos prismáticos 10X50.

UN PEQUEÑO VIAJE POR LA LUNA

Cuando la Luna se encuentra en los momentos más cercanos a su fase de Llena o precisamente en ese momento, podemos distinguir como hacia la derecha (Este de la Luna) aparece una zona oscura a modo de pinza por debajo de un óvalo oscuro. Si nos fijamos, la parte superior de la “pinza” es mayor que la inferior. Estaría compuesta de tres zonas, la más superior y casi centrada es el Mare Serenitatis, el Mar de la Serenidad. La segunda zona, más irregular, sería el Mare Tranquillitatis (Mar de la Tranquilidad) y finalmente uno de los brazos de la pinza termina con el Mare Fecunditatis (el Mar de la Fecundidad). Algo más arriba de la "pinza" se puede divisar el precioso Mare Crisium (Mar de las Crisis) aunque el mejor momento para ellos sean los días de Cuarto Creciente y anteriores. El Mar de las Crisis es una de mis zonas preferidas de la Luna, sino la que más. Finalmente, el brazo inferior de la pinza acaba en el Mare Nectaris, (Mar del Néctar).



En la parte superior izquierda (Noroeste de la Luna) aparece una zona oscura, junto a la “pinza” que es el oscuro Mare Imbrium (Mar de la Lluvia) el cual limita, casi sin continuidad (imperceptible la diferencia con instrumentos muy básicos) con el Oceáno Procellarum, el Océano de las Tormentas. Esta zona es la más extensa de la Luna y la más clara en su grisácea tonalidad.El Océano Procellarum finaliza hacia el Suroeste de la Luna con una región más oscura llamada Mare Nubium (Mar de las Nubes) y con otra, más al Sur y casi circular, que es la que constituye el Mare Humorum (Mar de la Humedad).

¡En un momento hemos podido visualizar las regiones más importantes de otro mundo! Recordemos también de nuestra anterior entrada los cráteres radiales de Tycho (al Sur de la Luna) y  Copérnico (al Este y en la línea central del disco lunar). Tengamos localizado a éste último cráter llamado en honor del gran astrónomo polaco que iluminó a la Astronomía con su teoría heliocéntrica, teoría quizá basada en las ideas de otro sabio griego que también supo iluminar la Astronomía de su época. Y no solo iluminó ese tiempo...

ARISTARCO, UN FARO EN LA LUNA

Un poco al oeste (a la izquierda) del cráter Copérnico podemos observar un brillante punto: el cráter Aristarco. En concreto es la zona más brillante de todo el disco lunar. Un diamante en la oscura tierra del Océano Procellarum. Su capacidad para reflejar la luz que recibe (lo que se conoce como albedo) es muy superior a la del resto de accidentes selenográficos. Es un cráter de impacto muy el faro de la Luna. Un astrónomo tan observador como William Herschel creyó que era un volcán con erupciones contínuas.
jóven (se estima su edad entre 300 y 500 millones de años) que no se ha visto afectado aún por procesos de erosión que permitan oscurecerlo. Esta poca edad explica la brillantez de éste cráter de unos 42 kilómetros de diámetro con paredes que casi llegan a los 4000 metros de altura. Su brillantez hace que sea conocido como

El cráter Aristarco en el terminador lunar el pasado 14 de noviembre. (Canon EOS300D  - 1/320 segundos ISO100 250mm.)
Muchos observadores han observado continuamente al cráter Aristarco por tratarse de una zona donde se observaban oscurecimientos o cambios de brillo, estos controvertidos fenómenos conocidos como TLP, Transient Lunar Phenomenon, (Fenómenos Transitorios Lunares). Aunque siempre existe cierta duda acerca de la observación de estos fenómenos no es menos cierto que la sonda Lunar Prospector detectó grandes cantidades del gas noble radón que podrían ser el origen de dichos cambios, algo que ya hiciese la sonda Apollo XV.

Aristarco también tiene una estructura de bandas radiales como Tycho y Copérnico, aunque más oscuras. Proceden del material depositado tras el impacto que provocó el cráter. Con un pequeño telescopio de 6 centímetros de diámetro puedo observar 2 bandas, pero con un refractor de 12 centímetros se pueden llegar a ver hasta nueve (sólo las he observado dos veces, normalmente me quedo en siete). Estas bandas fueron dibujadas por primera vez por el gran observador Lord Rosse en la segunda parte del siglo XIX pero curiosamente se les pasó por alto a otros astrónomos de conocido renombre y observadores lunares. Aún se desconoce la razón de ello.

El telescopio espacial Hubble hizo, en 2005, un estudio fotográfico del cráter y parece probable que encontrara en él titanio y óxido de hierro. Con las fotografías realizadas recreó un "acercamiento virtual" al cráter que aparece en éste curioso vídeo.




¿Qué observas tú en Aristarco?




miércoles, 3 de septiembre de 2014

La Luna Llena

Cuando la Luna está en fase llena es de todos sabido que la observación astronómica se torna difícil. Si encima observas desde la ciudad peor aún. Sí que es cierto que se pueden observar estrellas dobles, estrellas variables, y por supuesto el Sol durante el día pero, no es lo mismo. De modo que se me antoja que como primera entrada "lunar" podríamos aprender a reconocer los detalles selenográficos de la Luna. Saber distinguir zonas de otros mundos es, como mínimo, emocionante.


La Luna no tiene atmósfera y su superficie refleja muy poca luz de la que recibe, en torno a un 7%. De manera que, en un simple vistazo, podemos reconocer que los colores de nuestro satélite son el blanco y el negro pasando por todas las tonalidades de grises. Una simple mirada hace que distingamos zonas oscuras, a las que llamamos Mares y zonas claras que reciben el nombre de Tierras. Los mares son extensas zonas que originariamente habían sido grandes cráteres producidos por impactos de asteroides y que han sido recubiertos por el magma procedente del interior lunar. Las zonas claras que hemos llamado tierras (y no en referencia a nuestro planeta) forman la mayor parte de la superficie lunar y están formadas por cráteres de impactos producidos por objetos de distintos tamaños.

La observación de la Luna se realiza mejor cuando se sitúa en la fase de los cuartos, días antes y después, donde podremos observar mejor los detalles lunares por el contraste de luz existente. Pero para empezar no está de más aprovechar la Luna Llena para distinguir las zonas claras y las oscuras: mares, cráteres, cordilleras montañosas, valles, grietas, rayos...

Os presento un buen mapa de la Luna en pdf obtenida como enlace desde la web de Andrés Valencia del Observatorio Arval de Caracas (Venezuela). Aconsejaría imprimir las tres primeras hojas y situarnos con nuestros prismáticos o nuestro pequeño telescopio a ir reconociendo detalles.

CRÁTERES RADIALES

Fijémonos por ejemplo en la parte sur de la Luna donde pueden verse unos rayos que salen del cráter Tycho. Estos rayos son el resultado del impacto brutal que originó el cráter y cuyos restos quedaron esparcidos al solidificarse. Son realmente preciosos y es un buen momento para que sean observados. También existe otro cráter más al norte de Tycho, y también brillante, llamado Copérnico que dispone de un sistema radial también perfectamente visible pero no tan destacado como los procedentes de Tycho.

Podemos también aprovechar para ver como existen más cráteres en las zonas llamadas tierra (las claras) que en los mares o zonas oscuras lo cual tiene su explicación por el hecho de que las tierras son más antiguas y los cráteres de dicha zona se formaron en épocas tempranas del Sistema Solar.

En resumen, podemos pasar un buen rato observando a nuestra vecina la Luna. Reconociendo sus formaciones con un pequeño instrumento (incluso a simple vista). En éste blog le dedicaremos varias entradas a nuestra acompañante viajera.